En la tarde de ayer se vio a un Sevilla que dicta mucho de aquel que ganaba títulos, es más aquellos jugones que nos hacían disfrutar como chiquillos parecían caricaturas si lo comparamos con años anteriores. Es difícil comentar un partido tan malo el que disputo Sevilla y Mallorca, pues al que le guste el fútbol es complejo que aguante mucho tiempo viendo lo que se debe llamar antifúbol y donde dos equipos salen a no perder. Desde el Blog., guste o no guste, haremos criticas cuando se juega mal y alabanzas cuando se juegue bien.
En el partido solo se puede salvar a la defensa muy concentrada todo el partido y a Jesús Navas que al menos lo intento por su banda generando las dos únicas ocasiones de peligro. El equipo a pesar de todo es segundo después del desastre europeo, el cual no se comenta nada en el Blog. por respeto a los socios de la Peña, pues de hacerlo iba a ser tan crítico como muchos periodistas de As, pero la imagen dada en Mallorca fue de un equipo de segundo nivel o sea de mitad de la tabla.
En el primer tiempo el Sevilla le dejó el peso del partido al Getafe creando peligro por la banda de Mosquera, vaya partido del colombiano, cometiendo un penalti infantil a la media hora de juego y que San Palop paró como es frecuente en él, a partir de ahí el Sevilla mejoró y en un excelente pase de Romaric a Luis Fabiano, el brasileño define como los hacen los grandes delanteros subiendo al luminoso del Coliseum el primer gol. Así nos fuimos al descanso, pero con un sabor agridulce por el juego desplegado.
Ahora solo nos queda esperar las grandes citas, tres de ellas en nuestro Estadio y que de conseguir buenos resultados nos auparan a los puestos altos de la clasificación.
Una primera parte de lo peor que he visto al Sevilla en un derbi desde hace mas de una década, sin oficio, sin meter la pierna, andando, con un rival pletórico, presion axficiante, robando balones con facilidad en la parcela ancha y entrando por la banda derecha como pedro por su casa, hicieron que el partido tuviera un solo dueño y que los verdiblancos no se fueran al vestuario con un resultado favorable gracias a la suerte y a las intervenciones de Palop. Aún así tuvimos una ocasión clarisima en el minuto 15 a manos de David Prieto que de entrar quizás hubiera cambiado el derbi. 
No quiero echar mas leña al fuego, y dejo a los aficionados sevillistas que opinen del penoso derbi que jugó el Sevilla en la tarde de ayer.
Fue entonces cuando el Sevilla, F.C. sacó la garra, el coraje y la superioridad para arremeter con amor propio la meta defendida por Sergio Sánchez. Despertó, empezaron a ser los de siempre, los que por pundonor, garra y técnica levantaban un resultado muy comprometido. Así fue como del 0-2 pasamos al 3-2, para terminar este primer periodo raro y atípico en nuestra bombonera con un penalti absurdo de nuestro central Squillaci ¿cuántos más tiene que hacer este muchacho, pues ya van tres?, para irnos al descanso con un empate a tres
